Elisa Fernández

Texto extraído de: “Aquí muere hasta el apuntador”. 

Bitácora de Victor Iriarte.

“Me interesa sentir el presente, percibir el espacio y los factores externos que influyen en el movimiento, de ahí que ahora esté centrada en la improvisación más que en bailar coreografías cerradas”.

“Nada es más o menos interesante, sino que en cada momento cada cosa es lo que es, nada está bien o está mal: quiero bailar la vida, o lo que yo pienso que es la vida”. “Quizá cara al público hay aspectos que le pueden parecer feos o grotescos, pueden verse fallos, te puedes caer, pero para mí es muy interesante, porque es humano que salga a la vez algo bueno y algo malo”.

Reflexión de Elisa desde Incheon, Corea del Sur 

(texto fragmentado Diario Noticias):

«Me entristece verdaderamente que se cancele el festival Punto de Vista. En épocas de crisis, hay que pensar en estrategias a largo plazo en lugar de apañar los presupuestos como sea para salir al paso. Es necesario ver qué tipo de sociedad futura queremos, cuál es la dirección a llevar. Pamplona se está quedando atrás, pero es algo que a la gente no le importa, mientras pueda disfrutar de sus 9 días al año de fiesta salvaje. ¿Será algún día la cultura de calidad también una cultura de masas? Ojalá».

John contesta:

A mi también me apena enormemente. Anthony Robbins, gurú de la PNL (Programación Neuro Lingüística) dice: "El reto del liderazgo, estriba en tener poder y visión suficiente para prever con antelación lo que resultará de nuestras acciones, sean grandes o pequeñas". El inquietante planteamiento de Elisa, me temo, augura un calamitoso desastre. Con la visión que nos caracteriza, la especie humana recogerá lo que tan atolondradamente hemos sembrado: 

una sociedad futura de mentes no pensantes. 

Tenemos que ser valientes y afrontar de cara nuestras responsabilidades. Esa fiesta salvaje, es un fiel reflejo de la escala de valores imperante. De vez en cuando, cogerse un poco de temple y disfrutar en sana armonía, resulta positivo para nuestra integración social. Pero, no saber estar sin beber y emborracharse hasta perder la conciencia, es demencial. La CULTURA DE CALIDAD a la que alude nuestra bailarina, jamás será la cultura del pueblo mientras no seamos capaces de aprender de nuestros errores. Allá la conciencia de cada uno para saber qué enmendar.

Su videodanza en: vimeo